El Impulso. Publicación: 10/12/2009 01:00:00 a.m.
Los comerciantes de la Av. Libertador y calles cercanas del centro de Cabudare nos encontramos sumamente preocupados por el incremento desmedido de la inseguridad.Es el hecho de que de un tiempo para acá hemos sido blanco de los maleantes y malhechores que circundan los alrededores de la avenida Libertador, al punto de que por lo menos un local es asaltado diariamente y como si fuera poco el que se salva es atracado en los vehículos de transporte público o en los llamados rapiditos.Podemos destacar un hecho puntual sucedido el día 17 de septiembre a las 2:15 minutos de la tarde, cuando un ciudadano estaciono su vehículo en la av. Libertador entre calles La Cruz y Alvizu, a pocos metros de la cede de la Alcaldía del municipio Palavecino y fue atacado por un maleante para despojarlo de un dinero que minutos antes había retirado de una entidad bancaria. El ciudadano fue herido por tres disparos de los seis que hizo el malhechor, ante la mirada impotente de los transeúntes y comerciantes de la zona, lo mas preocupante del caso es que ni siquiera por el hecho de la cercanía de la Alcaldía se presentaron oficiales de la policía. Una patrulla apareció media hora después y ni siquiera paró su marcha.Nos hemos dirigido a las autoridades del municipio, pero nuestras peticiones no han sido consideradas y nos preocupa la cercanía de las fechas navideñas y el fin de año, cuando se incrementan las ventas. Por este motivo queremos hacer público nuestro llamado desesperado de auxilio hacia las autoridades policiales para que se implementen los patrullajes y de ser posible alcabalas en el centro de Cabudare y de esta manera disminuir el auge delictivo en la zona.Recordemos que Cabudare esta en pleno desarrollo económico, pero bajo estas circunstancias ningún comercio, por muy grande que sea, soportará la arremetida de los delincuentes (algunos han sido atracados hasta tres veces en lo que va del año) y de seguir así, tendrán que cerrar sus puertas. Esperamos una respuesta satisfactoria de las autoridades municipales y policiales.
Marysabel Escobar Ochoa
Los comerciantes de la Av. Libertador y calles cercanas del centro de Cabudare nos encontramos sumamente preocupados por el incremento desmedido de la inseguridad.Es el hecho de que de un tiempo para acá hemos sido blanco de los maleantes y malhechores que circundan los alrededores de la avenida Libertador, al punto de que por lo menos un local es asaltado diariamente y como si fuera poco el que se salva es atracado en los vehículos de transporte público o en los llamados rapiditos.Podemos destacar un hecho puntual sucedido el día 17 de septiembre a las 2:15 minutos de la tarde, cuando un ciudadano estaciono su vehículo en la av. Libertador entre calles La Cruz y Alvizu, a pocos metros de la cede de la Alcaldía del municipio Palavecino y fue atacado por un maleante para despojarlo de un dinero que minutos antes había retirado de una entidad bancaria. El ciudadano fue herido por tres disparos de los seis que hizo el malhechor, ante la mirada impotente de los transeúntes y comerciantes de la zona, lo mas preocupante del caso es que ni siquiera por el hecho de la cercanía de la Alcaldía se presentaron oficiales de la policía. Una patrulla apareció media hora después y ni siquiera paró su marcha.Nos hemos dirigido a las autoridades del municipio, pero nuestras peticiones no han sido consideradas y nos preocupa la cercanía de las fechas navideñas y el fin de año, cuando se incrementan las ventas. Por este motivo queremos hacer público nuestro llamado desesperado de auxilio hacia las autoridades policiales para que se implementen los patrullajes y de ser posible alcabalas en el centro de Cabudare y de esta manera disminuir el auge delictivo en la zona.Recordemos que Cabudare esta en pleno desarrollo económico, pero bajo estas circunstancias ningún comercio, por muy grande que sea, soportará la arremetida de los delincuentes (algunos han sido atracados hasta tres veces en lo que va del año) y de seguir así, tendrán que cerrar sus puertas. Esperamos una respuesta satisfactoria de las autoridades municipales y policiales.
Marysabel Escobar Ochoa
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